LAS MUJERES DUEÑAS DEL MUNDO

Me dicen que solo los varones son los únicos que pueden buscar en internet, lo mejor de la sexualidad humana.  Y mientras, las mujeres, debemos conformarnos con ser delincuentes que en la oscuridad de la noche, y en las habitaciones, si tenemos internet, podamos navegar en busca de información al respecto.

     Las mujeres, decimos que buscamos espacios para nosotras, pero al mismo tiempo, seguimos los pasos de los varones.  Si ellos, escupen, lo haremos. Si ellos son alcoholicos, lo superamos. Realmente, no hay nada que no sea nuestro, sino es el llanto, los quejidos, y la maternidad. 

    Me encantaría, ser yo misma, donde quiera que yo voy.  Si no me afeito las axilas, soy una chica sin higiene 

  ¿De dónde provienen estas reglas?  Entonces, hay que vivir en los lugares donde es permitido este tipo de comportamiento para que no me vean como alguien vulgar.  Si decido no depilarme la línea del bikini o de las piernas, acaso ¿Dejo de ser mujer?

    Básicamente, para ser una chica de hoy en día, debo ser similar a las modelos de revistas, porque ser sincera y autentica, no aguanta el mínimo juzgamiento de mis propias congéneres. 

  Seamos claros, realmente somos las dueñas de este mundo.  Con un  par de senos y una vagina, logramos más que con leyes a favor de la mujer. Si un hombre nos quiere violar, lo hará aunque exista una pena superior a tres años de prisión. Si nos quieren asesinar lo harán, aunque existan policías, y congresistas que velan por nosotras. Al final, seremos nosotras quienes debemos velar por nosotras mismas.

   No propongo la lucha de sexos. Los hombres no son nuestros enemigos, todo lo contrario. Es delicioso tener un amigo, un compañero, un amante, un novio o un esposo, que nos protege y nos provee.   Es parte de la naturaleza su existencia, y no se puede ir en contra de ella. Pero ahora, si nosotras existimos no es por ello, sino porque la naturaleza así lo ha querido.

Que una amiga, participe de un trío, es simplemente excitante. Pero no hay nada que se asemeje a un pene grueso, y erecto, ni siquiera un vibrador. No juzgo a las amigas que deseen ser lesbianas, o bisexuales, es su vida y deben gozarla porque es muy corta para evitarlo.   Yo he compartido a un hombre, con una amiga, y ha sido satisfactorio. No hay culpa, no hay lesiones ni daños. Y ella, ha compartido al suyo, y tampoco ha existido problemas. Los cuatro nos vemos en una fiesta, y el aroma del sudor y excitación precisamente quedan en la cama. Es todo. 

Cuando los jóvenes, desean experimentar su sexualidad, a través de una revista, una película o en Internet, no es más que el llamado de la naturaleza, que les invita a copular tarde o temprano, sea entre ellos mismos o con personas mayores.  Y esto no es algo que sea problema. La situación peligrosa es con quién.   Si es cierto que hay inescrupulosos que buscan aprovecharse de una chica joven, le colocan drogas en las bebidas y las violan, o las prostituyen o las ponen a trabajar en lugares lejanos a sus hogares.  Todo eso es cierto, pero no por ello, se puede crear un estado de incertidumbre en la población juvenil. Sino un estado de alerta.

      Un par de senos invita a acariciarlos y hacernos sentir bien, sabiendo que damos placer a quienes los besan y tocan.  No hay nada malo en ello. Es parte de la naturaleza de ser mujer.   Pero hay que saber decidir.  Es responsabilidad saber que es lo que deseamos, y cómo y cuándo.  Las cosas tienen su límite, al igual que en la vida. No todo es libertinaje, pues depende de cómo deseemos vivir nuestras vidas. Es lo que hace la diferencia.

         Así que es un orgullo ser mujer, y vivir la vida como tal, y saber en el fondo que siempre hemos tenido al mundo en nuestras manos.  Somos, las dueñas del mundo.